La casa original constaba de dos volúmenes, el que está en contacto con la fachada principal y un granero que ocupaba el fondo de la parcela. El espacio libre entre ambos, necesario para dar respiro a la casa, ha sido ocupado a lo largo del tiempo por diversos elementos añadidos. El proyecto de Horma Estudio pretende respetar la arquitectura existente potenciando los elementos originales y eliminando aquellos añadidos que dificultan la lectura del espacio inicial
AM House. Una fachada antigua que esconde una revolución residencial
La imaginación de dos amigos y sus dos hijas llevó a AM House a reinterpretar el espacio de una casa en el centro de la ciudad de Vila-real. Un espacio atento a las necesidades de una nueva generación sin olvidar el pasado que aún perdura. La fluidez espacial y la calidez de los materiales junto con la guía de la luz natural muestran cómo habitar la casa
Tras el primer paso “liberador”, el proyecto tiene la tarea de conectar los dos volúmenes para dar cabida al programa doméstico necesario y dotar al espacio de un sentido global. Para ello se utiliza el patio, que se convierte en el elemento principal, capaz de iluminar, articular los espacios y dar a la casa el carácter necesario, estableciendo un diálogo entre el pasado, el presente y el futuro
La planta baja de AM House alberga la parte pública de la vivienda, desarrollada en toda la extensión del edificio en sus 5 metros de ancho por 22 de largo. La secuencia espacial propuesta se entiende como un único espacio que en cada una de sus partes tiene una dimensión específica vinculada a diferentes funciones. Es el patio el que conforma y da sentido a la secuencia: un espacio para la contemplación, pero también funcional, definido más por los materiales que lo componen que por particiones físicas, siendo concebido como un espacio intencionadamente difuso para conectar con los espacios adyacentes
En las plantas superiores se sitúan las estancias más privadas, las habitaciones del primer piso y el estudio de la última planta, bajo la cubierta de madera original y conectados a una terraza que revive el patio de la planta baja. La reurbanización de la fachada, lejos de alterar los ritmos geométricos existentes, interviene en la profundidad de la ventana a la calle en la planta baja, sustituyéndola por un desfondado habitado por frondosas plantas que mejoran la intimidad de la casa y permiten abrir la ventana con seguridad, permitiendo la ventilación de toda la zona pública
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