Un viticultor del Priorat necesitaba una nueva empresa vitícola en el corazón de un pueblo, Gratallops. Harquitectes acoge con satisfacción el reto del cliente: permitir que la bodega contribuya al proceso de vinificación biodinámico, intentando optimizar el comportamiento pasivo del edificio
Producir vino en las estrechas calles de un pueblo histórico: Celler clos pachem 1507
En el corazón del histórico pueblo español de Gratallops, entre paredes de piedra y ladrillo, se halla una empresa vinícola, Celler clos pachem 1507: un gran pabellón con comportamiento pasivo
Celler clos pachem 1507 se levanta sobre un solar poligonal en forma de L, entre calles estrechas y casas adosadas, a excepción de la imponente iglesia que domina el pueblo. El límite del solar está marcado por un antiguo muro de piedra, que se eleva 10 metros, con una línea irregular: la geometría de este muro es el punto de partida del proyecto
La normativa urbanística de obligado cumplimiento y el deseo de construir el pabellón más grande posible llevaron al diseño de dos áreas diferenciadas: un gran volumen con un plan regular, lo más grande y alto posible, destinado a la vinificación, y el resto de la zona en forma de Z. en el que se recogen todos los espacios alrededor del pabellón
El interior parece un enorme espacio alto de tres pisos, donde se ubican las tinas de fermentación del vino, el corazón del proyecto. Un sistema de mampostería de carga de ladrillo de múltiples capas genera bolsas de circulación de aire entre las paredes, lo que permite que el edificio se enfríe. Habitaciones más pequeñas dentro de estos grandes muros albergan las actividades complementarias de la bodega
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