Cuatro familias y una visión compartida. De la comisaría al cohousing responsable y ecológico

El edificio se convirtió, según el proyecto de remodelación de POLYGOON Architectuur, en cuatro viviendas unifamiliares. Los proyectistas colocaron un tabique adicional que atraviesa la nave central original. Esta intervención permitió conservar la distribución interior y la arquitectura de ladrillo típica de la fachada frontal de la antigua comisaría. Para dotar a las cuatro viviendas de una superficie similar, algunas de ellas sufrieron una pequeña ampliación, por lo que cada vivienda tiene una estructura ligeramente diferente

A pesar de la uniformidad del exterior, cada familia disfruta de un hogar hecho a medida. El jardín y el depósito de bicicletas son compartidos. El sótano, bajo el espacio original, funciona como lavandería común donde los residentes pueden reunirse de manera informal. Aquí también hay un equilibrio entre la interacción y la privacidad. Un reto específico para el nuevo cohousing era realizar una renovación ecológica. Las viviendas hacen un uso eficiente de la energía y el agua y utilizan principalmente recursos renovables como la madera y la celulosa

Dentro del cohousing, los materiales recuperados recibieron una segunda vida. Un tejado ecológico, sistemas de recuperación de agua de lluvia y calefacción solar para el agua sanitaria completan la serie de intervenciones sostenibles. Para los clientes era fundamental la presencia de un gran jardín comunitario, por lo que se demolieron algunos garajes que ocupaban el patio del edificio original 

Los nuevos habitantes de la antigua comisaría pueden contemplar el jardín desde sus comedores: un soplo de aire fresco en la ajetreada Amberes. La propiedad también cuenta con parte del espacio del lado de la calle que había sido pavimentado y utilizado como aparcamiento antes de la intervención. Dado que los clientes, entre otras iniciativas responsables, también se adhieren al uso compartido del coche, este espacio puede utilizarse como zona verde de la que también puede disfrutar el resto del vecindario