Hiyoku, una villa de dos pisos ubicada a 2 km al oeste de la ciudad de Niseko, ofrece vistas al río Shiribetsu y a las pistas de esquí rodeadas de árboles de montaña en la distancia, fusionándose perfectamente con el paisaje montañoso japonés
Un techo se asemeja a un ala donde debajo las superficies verticales de las fachadas se enfrentan en un diálogo enérgico entre el afilado metal y el calor del cedro de Dounan. La amplitud aleatoria de las superficies recuerda al motivo vertical de la vegetación circundante, integrando así la arquitectura de Hiyoku perfectamente en el paisaje que la rodea.
El cliente de DAIDA Design Studio deseaba que el escenario natural se convirtiera en parte integral de la arquitectura partiendo de un diseño moderno que utilizara una mezcla de materiales como madera, acero y cemento.
El estudio, especializado en proyectos de arquitectura que relacionan el entorno interior y exterior, construye la estructura del edificio en acero y los suelos, paredes y techos en madera, a excepción de las vigas principales. El exterior combina la expresión cálida del cedro con la afilada del metal, acentuando las fortalezas de uno y otro
La forma general del edificio se debe a la intención de capturar las vistas del espectacular panorama circundante.
El primer elemento que se encuentra al entrar en la vivienda es una pared con aberturas bajas y horizontales que permiten privacidad, mientras que en el este la construcción se abre con un ventanal de 3 metros que proyecta la mirada hacia las montañas. Lateralmente, otras aberturas ubicadas en la parte superior permiten la entrada de luz y aire.
Este proyecto de DAIDA Design ganó en 2018 el Beihai Steel Design Award y la mención de honor en los IDA Design Awards
