El proyecto tiene como punto de partida el interior de la casa y la relación entre los espacios. El resultado es un chalet de dos pisos, dentro del cual se crean vacíos capaces de evocar sensaciones corporales y proyectar la propia percepción en el espacio
Interiores diseñados con atención. La riqueza perceptiva mejora la experiencia de la vivienda
El estudio Bureau Daniel Zamarbide, a través del estudio de espacios domésticos, recupera un chalet a partir del diseño de su interior, completamente recubierto de madera de abedul, creando nuevas conexiones espaciales
Las experiencias perceptivas enriquecen continuamente la experiencia de la vivienda. El volumen interno está completamente cubierto de madera de abedul y las conexiones espaciales favoritas para multiplicar y mejorar los puntos de vista
Los agujeros en la fachada afirman la naturaleza contemporánea del edificio que se desvanecerá con el tiempo, convirtiéndose en parte de la naturaleza vernácula del edificio. El interior está diseñado con extrema atención y delicadeza en los detalles
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