Recuperación innovadora en Barcelona. Paz y tranquilidad en el corazón de la ciudad

El estudio Miel Arquitectos y el estudio P10 deconstruyen las barreras rígidas del diseño de finales de 1800. El frente norte del apartamento ha sido diseñado para transmitir la luz reflejada desde los edificios del frente y desde el patio. El objetivo principal, utilizar el espacio, es de 48 metros cuadrados para crear áreas individuales que generen una respuesta flexible a las necesidades residenciales, como el trabajo, el descanso, el juego, la industria y la higiene

La estrategia de intervención consiste en conectar un espacio de uso personal y social dentro de una doble piel. Un nido de tranquilidad ubicado en el centro del espacio, que actúa como un canal diagonal, permitiendo que la luz penetre profundamente en la sala de estar, el área de trabajo, continuando en la cocina y finalmente en el baño

De este modo, la habitación, generalmente poco utilizada durante el día, se convierte en un lugar de paso de aire y luz, y ofrece un banco, un asiento o quizás un escenario improvisado para esas noches en las que el tiempo parece haberse detenido

El nido está envuelto en madera de roble y se hace íntimo gracias a algunas cortinas y una puerta corrediza. Se encuentra en una posición privilegiada de aislamiento. Detrás de la cama de invitados, los diseñadores esconden las unidades de aire acondicionado

Una puerta, que también funciona como una pizarra y una cortina, establece una relación ambivalente entre la cocina y el baño, con el lavabo entre los dos. Los azulejos negros del baño realzan las sombras, y sus líneas limpias contrastan con las imperfecciones de las paredes de ladrillo del siglo XIX

Miel Arquitectos desnuda los estratos del tiempo, el nacimiento del Eixample y todas las vidas e historias entrelazadas, muestra el contraste con la existencia flexible de los nómadas del siglo XXI