Un monumento nacional en ruinas se transforma en exclusivas residencias en la Watertower Utrecht

El reto del proyecto de renovación Watertower Utrecht consistía en crear aberturas que permitieran la entrada de una buena cantidad de luz natural, una hermosa zona exterior con vistas a la catedral y un acceso seguro por ascensor y escalera, todo ello cuidadosamente integrado en la arquitectura del centenario monumento por parte del estudio Zecc Architecten 

En la parte inferior de la Watertower Utrecht, del primer al tercer piso, se construyeron tres estudios idénticos en las plantas existentes. En estos espacios se ha conservado al máximo el carácter de la robusta fábrica de ladrillo y las vigas de madera u hormigón
Para los estudios, se crearon tres grandes aberturas en la fachada como una nueva “capa temporal”, con puertas plegables de acero sobre un marco de acero corten. Cuando la fachada está totalmente abierta, se crea una logia compacta en la casa como espacio exterior

En lo alto de la Watertower Utrecht, en la antigua torre de agua, hay una casa de 400 m2 distribuidos en seis plantas. La casa comienza en la cuarta planta, donde se encuentra la entrada y el acceso a un ascensor privado. El cálido color óxido y la mampostería que vuelve a hacerse visible, combinados con el blanco y la madera de nogal de las nuevas intervenciones, proporcionan una entrada a la casa luminosa, cálida y única

En el “viaje” hacia arriba, la parte inferior alberga las funciones más privadas, como las habitaciones de invitados, la zona de relax y el almacén. El espacio se abre cada vez más hacia arriba, creando una espectacular sucesión de planos, vacíos y escorzos
Las paredes de acero oxidado del depósito son visibles en toda la casa. Junto con el suelo flotado de hormigón, confieren a la casa un carácter cálido e industrial. Las nuevas intervenciones en blanco, los volúmenes modernos y las piezas de nogal completan este equilibrio