Edificio Fangzhang, espacio vacío para trascender lo mundano.

Dentro del Palacio Tongbai, uno de los templos taoístas tradicionales más importantes en China, la reconstrucción del tanque de agua da lugar al nacimiento del Edificio Fangzhang: en el lenguaje taoísta, el "lugar donde viven los inmortales", el edificio de arquitectura altamente simbólica acoge a los visitantes a su llegada y la práctica diaria del maestro

Tradición y modernidad en el Edificio Fangzhang

Simbólicamente ubicado en el 2° nivel de los "8 estratos de la montaña", aquel donde se practica lo inmortal pero también el más cercano al mundo humano, el Edificio Fangzhang se encuentra en la parte superior del patio del complejo del palacio Tongbai. Para el estudio KiKi ARCHi, que en sus proyectos de arquitectura diseña el nuevo edificio, integrar el lenguaje del diseño moderno basado en el estilo tradicional se convierte en el foco del trabajo.

El concepto taoísta del vacío como guía de diseño

Los arquitectos deciden utilizar el concepto taoísta del vacío "KONG" como guía para expresar el de la sabiduría, fusionándolo en el diseño del espacio como lo describe el 'Qingjing Jing': "Para aquellos capaces de eliminar los deseos, al mirar en sus corazones, no hay pensamiento que pensar; al ver los objetos, no hay forma que describir; al ver un entorno lejano, no hay nada que ver; ... solo hay el verdadero Yo que ver. Si se ve el vacío (KONG) sin el pensamiento de ese vacío (KONG), llevará ese vacío (KONG) a su extremo."

Arquitectura que dialoga con el cielo

El edificio Fangzhang, desarrollado en tres pisos, utiliza una combinación de columnas de cemento y cedro como estructura principal, acompañadas de paredes de piedra, fachadas de vidrio y ventanas que aligeran visualmente la estructura de abajo hacia arriba. Las columnas verticales parecen rozar el cielo, mientras que los techos simplificados y sin decoraciones tradicionales parecen estar suspendidos, encarnando el concepto de 'vacío'.

Una fusión de diseño contemporáneo y pensamiento taoísta

El lenguaje de diseño contemporáneo combina el pensamiento abstracto y el espíritu taoísta para representar la trascendencia de lo mundano. El lucernario circular en la planta baja introduce a los visitantes a la filosofía del 'cielo redondo, tierra cuadrada', mientras que en el segundo piso una plataforma panorámica para la meditación se abre hacia la naturaleza, con un techo de cedro que evoca el concepto taoísta de las 'ocho direcciones'.

Un patio vivo y sostenible

El patio en el segundo piso integra paisajes artificiales enriquecidos con agua y vegetación, elementos que infunden frescura y vitalidad al espacio. Este entorno contribuye a regular la temperatura y la luz, con una piscina que reduce la carga térmica en el piso inferior y un lucernario que introduce luz natural. Los materiales locales utilizados refuerzan el enfoque sostenible, creando un equilibrio orgánico entre forma y contenido.