La reestructuración y reconfiguración de una casa construida en los años 80 ha permitido aprovechar sus 300 m² de superficie para transformar esta residencia de fin de semana, ubicada en Cuernavaca, Morelos, en un proyecto renovado que actualiza la estructura y la hace acogedora
El equipo de NURBANA Desarrollo Arquitectónico se ha enfocado en corregir los daños causados por la falta de mantenimiento a lo largo de los años. Se han actualizado las instalaciones y renovado los revestimientos, seleccionando cuidadosamente materiales y muebles adecuados a las condiciones de uso. Este proceso tuvo como objetivo garantizar el bienestar y la comodidad de los habitantes, siempre respetando las normas establecidas por el condominio.
Sin aumentar la superficie de la construcción original, la terraza exterior cubierta se integró en el comedor principal, ampliando significativamente este espacio. La renovación ha fortalecido el vínculo entre el interior y el exterior, realzando una vista única de 45 grados sobre el jardín común.
Esta nueva área incluye una sala de estar, un comedor, una zona de barbacoa y un baño, permitiendo disfrutar del clima privilegiado de Cuernavaca durante gran parte del año. Los espacios exteriores se han concebido como puntos de reunión esenciales.
La habitación principal ha sido reconfigurada para ampliar el área de servicio, ofreciendo mayor capacidad y comodidad. Además, el patio de servicio ha sido cubierto con una cúpula lo suficientemente alta para garantizar una ventilación natural, convirtiéndolo en un espacio funcional para actividades relacionadas con el mantenimiento de la residencia.
Esta intervención se destaca por su enfoque de renovación sostenible, que respeta la estructura original y maximiza la experiencia de vivir en un espacio adaptado a las necesidades modernas, manteniendo la armonía con el entorno circundante.
