Rianxo: nuevas estructuras portuarias inspiradas en el ambiente natural

Funcionalidad e innovación: un puerto a la vanguardia

Los nuevos almacenes surgen como una respuesta concreta a las necesidades modernas de quienes trabajan en el sector portuario, con un diseño innovador. Los antiguos edificios han sido reemplazados por dos almacenes modernos, cada uno con 24 compartimentos bien diseñados, para un total de 44 unidades. Cada espacio cuenta con servicios sanitarios, ofreciendo comodidad y funcionalidad a quienes trabajan diariamente en el puerto.

El compromiso en el diseño, realizado por Santos y Mera arquitectos, no se limita a la practicidad: cada estructura tiene un revestimiento continuo que conecta la fachada este con la oeste, creando una imagen orgánica que evoca las olas del mar y el flujo del estuario. La piel continua de los edificios no solo proporciona un aspecto natural, sino que también cumple una función práctica como visera para proteger de la lluvia, el sol y el viento.

Una arquitectura que dialoga con el entorno

En el corazón del proyecto está la voluntad de crear una arquitectura que no se imponga sobre el entorno, sino que se funda con él. La disposición de los almacenes ha sido estudiada para no interrumpir el panorama del estuario y las calles que rodean la zona. Gracias a una ubicación ponderada, los edificios preservan la continuidad visual y se adaptan de forma natural al contexto urbano, evitando barreras visuales y creando un flujo armonioso con el territorio circundante.

El proyecto ha elegido líneas y proporciones fuertes pero simples, que reflejan una visión de arquitectura sostenible, concreta y respetuosa con el medio ambiente. La forma orgánica de los edificios rompe con la estética industrial típica de estas estructuras, introduciendo en su lugar una coherencia estilística que evoca el movimiento de las olas y la atmósfera natural del puerto.

Estructura y sostenibilidad: un compromiso con el medio ambiente

La construcción de estos edificios se ha realizado con simplicidad y precisión. La estructura de hormigón prefabricado se conecta de forma sólida a los cimientos, mientras que las fachadas y cubiertas están hechas de materiales ligeros, como madera y metal, que dan forma a los edificios y aumentan su sostenibilidad. Todos los materiales utilizados están certificados a nivel nacional o europeo, con atención a la reducción del impacto ambiental y al futuro reciclaje, adoptando un sistema de ensamblaje en seco para facilitar la des-construcción.

Un proyecto alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible

Estos nuevos almacenes son un ejemplo de proyectos de arquitectura sostenible, contribuyendo a varios Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) tanto en términos de sostenibilidad social como ambiental.

El proyecto del puerto de Rianxo es un ejemplo significativo de cómo la arquitectura puede responder de manera innovadora y respetuosa a las necesidades funcionales y ambientales. Con una estética que evoca el entorno marino y un enfoque consciente hacia la sostenibilidad, el puerto se ha transformado en un espacio moderno, funcional e integrado en el contexto urbano. Rianxo cuenta ahora con estructuras que no solo satisfacen las necesidades diarias de los operadores portuarios, sino que también representan un compromiso hacia un futuro más sostenible, tanto para la comunidad como para el entorno natural que la rodea.