La arcilla expandida Leca ha sido utilizada para rellenar los túneles de contención en el tramo trentino de la ciclovía del Garda. Una solución innovadora en términos de seguridad y sostenibilidad que permitirá la realización de una obra que cubrirá más de 165 km atravesando Trentino, Lombardía y Veneto.
La ciclovía del Garda es una obra extraordinaria que, una vez completada, cubrirá más de 165 km atravesando Trentino, Lombardía y Véneto. La primera sección fue inaugurada en Limone sul Garda en 2018, ofreciendo un recorrido elevado con vistas espectaculares al lago. El proyecto prevé una inversión de aproximadamente cien millones de euros, con el objetivo de crear la ciclovía más larga de Europa.
El recorrido serpentea entre acantilados, pasarelas de vidrio y tramos suspendidos sobre estructuras metálicas. Incluye puentes, túneles y cruces sobre muros existentes, adaptándose a la conformación del territorio. En el tramo trentino, por necesidades de diseño y logística, la ciclovía pasa por el interior de la montaña, aprovechando túneles de contención para garantizar seguridad y protección.
En la región trentina, Laterlite ha proporcionado la arcilla expandida Leca para el relleno de los túneles de contención de piedras. Este material fue elegido por su ligereza y resistencia, que le permiten absorber la energía cinética de las posibles rocas que caen. Su estructura particular lo convierte en un excelente amortiguador, reduciendo los riesgos para los ciclistas que recorren la pista.
La arcilla expandida Leca es un material duradero, resistente a los agentes atmosféricos y químicos, que no se degrada con el tiempo. No absorbe agua, no se rompe con el hielo y garantiza un rendimiento constante. La elección de este material refleja la voluntad de crear una infraestructura segura y de bajo impacto ambiental, perfectamente integrada en el paisaje del Lago di Garda.
